martes, 18 de diciembre de 2012

Lo imposible



Por esta vez, seré breve en la reseña relativa al film que nos ocupa (y no para bien, precisamente), "Lo imposible", que arrasa en taquilla allí donde se estrena.

La película dirigida por J.A. Bayona, firmante de la más que correcta "El orfanato" supone, para quien esto suscribe, un insulto a la inteligencia del espectador. Me explico: coge la historia real de una familia (razón por la cual los guionistas no es que hayan tenido que estrujarse los sesos...), les cambia la nacionalidad (por aquello de hacer la historia más comercial), nos impacta con un inicio de lo más digno y espectacular... todo para, a la hora de la verdad, no hacer otra cosa que tratar de apelar a la sensibilidad del espectador, buscando la lágrima fácil y valiéndose de mil y una artimañas sensibleras. 

Naomi Watts y Tom Holland, correctos (destacando el niño). Ewan McGregor, de paseo. J.A. Bayona, tramposo.

Ver "Lo imposible" es una completa y absoluta pérdida de tiempo.

martes, 20 de noviembre de 2012

Looper



De la mano del, al menos para quien esto suscribe, desconocido Rian Johnson, llega "Looper", una cinta que a priori parece ser el típico vehículo de acción y ciencia ficción para lucimiento de su protagonista (en este caso, protagonistas), tal y como nos hace entender su tráiler, pero que en el fondo esconde más, muchísimo más.

"Looper" nos cuenta la historia de Joe (Joseph Gordon-Levitt), cuyo trabajo (de nombre looper) consiste en matar gente que le es enviada a tal fin desde el futuro. El problema (y la trama de la película) empieza cuando a quien le envían para que lo elimine es a él mismo unos años mayor (Bruce Willis).

Como decía al inicio, "Looper" es muchísimo más de lo que su tráiler nos muestra (ya sabemos que, muy a menudo, esos vehículos promocionales nos dan una idea bastante sesgada, si no directamente errónea, de lo que luego es el film completo), pues, cuando aquél nos da a entender que nos encontramos ante una película de ciencia ficción y viajes en el tiempo al uso, la realidad nos muestra que el guión, a cargo también de Rian Johnson, esconde una historia de lo más sólida e interesante, en la que la acción que tan convenientemente se nos enseña en los anuncios no es sino un complemento que enriquece notablemente el libreto.

Sin duda alguna, el punto fuerte de "Looper" es la historia, tanto por lo que nos cuenta (algo distinto... ¡aleluya!) como por cómo nos lo cuenta. En ambos puntos hay que reconocer las tareas llevadas a cabo por Johnson, en sus facetas de realizador y guionista, demostrando que nos encontramos ante un talento a tener muy en cuenta (esperemos que siga en la misma línea, quizá no tanto argumental, pero sí de calidad). En la parte actoral, es de recibo otorgar un merecido reconocimento tanto a Gordon-Levitt como a Willis, pues ambos desempeñan sus roles con notable eficacia: el primero demostrando que el hueco que se está haciendo en Hollywood no es inmerecido, consiguiendo componer una perfecta versión joven de Willis, y éste porque, le pese a quien le pese, es mucho más que un tipo que sólo sabe pegar tiros (aunque sea lo que más hace... ¡y cómo!).

Resumiendo, "Looper" es una cinta de lo más recomendsable si lo que se busca es algo original, y más aún si gustan de disfrutar de una buena cinta de acción y ciencia ficción. Eso sí, no dejo de reconocer que su parte central adolece de un ritmo considerablemente lento, lo que, quizá, ralentiza un poco el desarrollo de la historia...

martes, 30 de octubre de 2012

Total Recall (Desafío total)



Veintidós años después de que el nunca indiferente Paul Verhoeven nos trajera "Desafío total", protagonizada por un Arnold Schwarzenegger en estado de gracia y basada (o inspirada, juzguen ustedes, en el relato "Podemos recordarlo para usted al por mayor", del gran Philip K. Dick), se estrena en las pantallas de todo el mundo su remake, al que han bautizado exactamente con el mismo título (con el detalle de que en nuestro país le han dejado el "Total Recall" original para calzarle debajo el consabido título en español).

"Total Recall (Desafío total)" narra la historia de Douglas Quaid (Colin Farrell), un obrero de Las Colonias (situadas en el hemisferio Sur del planeta, al que los trabajadores llegan atravesando el núcleo...) que, a pesar de tener una vida relativamente tranquila y una esposa que aparentemente lo ama (Kate Beckinsale), sufre una serie de pesadillas recurrentes que le hacen pensar que algo no está de todo en su sitio dentro de su cabeza. Y ello se confirmará cuando Quaid acuda a una empresa dedicada a la implantación de recuerdos falsos en la mente de sus clientes, momento en el que saltará la alarma que lo convertirá en un prófugo buscado por la justicia por su supuesta relación con la Resistencia (liderada por un Bill Nighy que pasaba por allí) que se opone al gobierno del Canciller Cohaagen (Bryan Cranston).

Lo primero que llama la atención ante un film de las caracterísiticas del que nos ocupa es su más que completa y absoluta innecesariedad. Y es que "Desafío total", la original, es una cinta notable, que nos ofrece una historia original y más que interesante, logrando al mismo tiempo obsequiarnos con una de las mejores interpretaciones del inexpresivo Schwarzenegger (dentro de lo limitado de su registro, por supuesto). Si a ello sumamos que data de 1990... ¿por qué un remake? Buena pregunta...

La nueva "Desafío total" no es ni más ni menos que un claro ejemplo de la más que preocupante sequía de ideas que desde hace ya demasiado tiempo asola las mentes de los guionistas hollywoodienses, servido, eso sí, con notable eficiencia por Len Wiseman, responsable de las dos primera entregas de "Underworld" y de "La jungla 4.0", quien nuevamente demuestra tener una visión de lo más certera para el cine de acción, la cual, todo sea dicho de paso, es lo mejor de la película que nos traemos entre manos, dado que de su guión es mejor no hablar y de sus interpretaciones... mejor tampoco. O sí: creo oportuno dejar aquí patente la decadencia de Colin Farrell, otrora promesa del cine pero que poco a poco ha ido decayendo más rápido de lo que había subido, la más que destacable habilidad de Jessica Biel para desempeñar una y otra vez el mismo papel y la rutina con la que Kate Beckinsale lleva a cabo su rol sabiendo que goza de un status privilegiado al ser la Sra. Wiseman...

"Total Recall" supone una versión muy light de sus predecesora, dejándose por el camino casi todo lo bueno de ésta y ofreciéndonos un espectáculo de acción y efectos que, por lo menos, resulta considerablemente entretenido. No hay más.

lunes, 24 de septiembre de 2012

Abraham Lincoln. Cazador de vampiros



De la mano del, como ya me he referido a él en otras ocasiones, gamberro Seth Grahame-Smith, autor del libro en el que se basa el film y también guionista del mismo, llega "Abraham Lincoln. Cazador de vampiros", cinta curiosa donde las haya y que, guste o no, de lo que podemos estar seguros es de que no dejará indiferente a nadie. Y por si la mente pensante detrás de la historia no nos llama del todo la atención, sumémosle dos nombres de peso: Tim Burton en la producción y Timur Bekmambetov en la dirección. Casi nada.

"Abraham Lincoln. Cazador de vampiros" cuenta la historia del futuro presidente de los Estados Unidos de América que da título a la película, pero desde una óptica considerablemente distinta, pues nos los presenta como un temible cazador de chupa-sangres, uno de los cuales fue el responsable de la muerte de su madre. Al mismo tiempo, los vampiros son también los principales responsables detrás de la terrible esclavitud que Lincoln pretende erradicar con todas sus fuerzas. Y para combatir a las fuerzas del mal, se servirá de dos armas, juzguen cuál de ellas más poderosa: un hacha bien afilada... y la política.

Como decía al inicio de esta reseña, de lo que podemos estar seguros es de que una cinta como "Abraham Lincoln. Cazador de vampiros" llama la atención, y mucho. Y es que eso de coger a un personaje histórico y meterlo en una historia de corte fantástico en la que su auténtica vida no es sino simplemente el marco en el que desarrollar aquélla no es algo habitual. Claro que la cosa deja de sorprender si tenemos en cuenta que Grahame-Smith no es otro que el responsable de coger la obra "Orgullo y prejuicio" de la reputada escritora inglesa Jane Austen, meterle zombis en el medio y sacar todo orgulloso "Orgullo y prejuicio y zombis" (y nada de reescribir, ojo, sino que se trata de la historia original con unos ciertos añadidos...). Y si encima cuentas con la complicidad del excéntrico y genial Tim Burton (con quien Grahame-Smith ya colaboró al haber sido el encargado de redactar el libreto de la horrenda "Sombras tenebrosas"), pues imagínense ustedes: el espectáculo está servido.

Quizá lo más llamativo de la película que nos ocupa, y probablemente su mejor baza, sea la habilidad de sus responsables para, por así decir, hacer coincidir los hechos reales con los ficticios (y, en multitud de ocasiones, hacer depender los primeros de estos últimos), consiguiendo, por inverosímil que parezca, una historia sólida. Y por encima, su realizador nos obsequia con unas escenas de acción espectaculares (pecando de utilizar la cámara lenta en exceso, si bien ello es una lacra que suelen arrastrar todos aquellos filmes rodados para ser exhibidos en formato 3D...), lo que hace que el resultado final sea de lo más recomendable.

En lo tocante a la parte interpretativa de la cinta, cabe mencionar por encima de todo la labor desempeñada por su actor protagonista, el cuasi-desconocido Benjamin Walker, que desempeña a la perfección su tarea, tanto haciendo del Lincoln joven como del viejo, ya presidente. Menos atención merece el papel de malo-malísimo llevado a cabo de una forma más bien rutinaria por Rufus Sewell, pues se limita a hacer aquello que ya hemos visto en él en otras ocasiones. Y mucho menos atención todavía merece Mary Elizabeth Winstead, quien, película tras película, no hace otra cosa que demostrar sus grandes carencias como actriz.

En resumen, "Abraham Lincoln. Cazador de vampiros" es una cinta orientada, en primer lugar, a todos los amantes de ese sub-género cinematográfico que por méritos propios ya constituye el cine de vampiros dentro del género de terror, y en segundo lugar, a quienes disfruten con gamberradas como la que nos presenta Grahame-Smith (Seth, ojalá no cambies nunca).

jueves, 20 de septiembre de 2012

Los mercenarios 2




Dos años después del estreno de "Los mercenarios", producto de la idea surgida en la mente de su director, guionista y protagonista, Sylvester Stallone, de resucitar el concepto de actioner tan de moda en los años 80 y principios de los 90, y que tuvo en figuras como la suya propia, Arnold Schwarzenegger, Jean-Claude Van Damme, Chuck Norris y un puñado más a sus máximos exponentes, se estrena ahora, con la máxima expectación y dispuesta a reventar la taquilla, "Los mercenarios 2", en la que Stallone ha logrado la participación de algunas "viejas glorias" más.

"Los mercenarios 2" relata, en pocas líneas de guión, no nos engañemos, una nueva misión del grupo formado por Barney Ross (Stallone), Lee Navidad (Jason Statham), Yin Yang (un fugaz Jet Li), Gunnar Jensen (Dolph Lundgren), Ave César (Terry Crews) y Peaje (Randy Couture), a los que ahora se añade Billy el Niño (Liam Hemsworth), encargada nuevamente por el Sr. Iglesia (Bruce Willis) y que les llevará a enfrentarse al grupo comandado por el cruel Jean Villain (Jean-Claude Van Damme). En su tarea contarán con la inestimable ayuda de Booker (Chuck Norris) y Trench (Arnold Schwarzenegger).

Stallone es un crack. Así de claro. Tras años y años de encadenar un fracaso con otro, cuando parecía que no iba a conseguir levantar cabeza, va y se le ocurre la brillante idea de rodar una sexta entrega de Rocky, en la cual desempeña las labores de guionista, director y protagonista, dando como resultado un éxito rotundo, de ahí que, ya puestos, decida poner en marcha otra de Rambo, realizando las mismas labores, con la que obtiene un éxito más moderado que en el caso anterior. Así, recuperado en mayor o menor medida el favor del gran público, pone en marcha "Los mercenarios", que consiste, ni más ni menos, en hacer una cinta como las protagonizadas años ha por todos los pseudo-actores mencionados, con los mismos esquemas y, eso sí, con un considerable nivel de autoparodia, pero ahora juntándolos a todos en el mismo film. Resultado: taquillazo. Y claro, era de recibo una segunda parte, en la que cuenta con más de esos intérpretes de los que les hablaba, en este caso cediéndole las riendas de la dirección a Simon West (para algo ya vuelve a tener el prestigio suficiente para poder permitirse el lujo de contratar a alguien que haga lo que antes tenía que hacer él para tratar de sacar los proyectos adelante).

Seamos francos: "Los mercenarios 2", al igual que su predecesora, da exactamente lo que ofrece: tiros, explosiones, golpes, peleas, acción a raudales y el placer de ver juntos a los ídolos de quienes, como un servidor, se criaron viendo películas como "Máximo riesgo", "Perseguido", "Sudden Death", "Timecop", "Commando", "Demolition Man", "Desaparecido en combate" o "Delta Force". Quien espere más que eso, mejor que gaste su dinero en otra cosa.

Ya para terminar: "Los mercenarios 2" es una cinta para disfrutar, ni más ni menos. Y si saben lo que van a ver (digo yo que, siendo una segunda parte, estarán más que cansados de saber qué tipo de producto tenemos entre manos...), disfrutarán como enanos.

Ahora... ¡¡¡a por la tercera!!! La pregunta es: ¿con qué nuevas caras nos sorprenderá Stallone? ¿Quizá Steven Seagal? ¿Nicolas Cage? ¿Wesley Snipes (si sale de la cárcel, claro)? O, si hacemos caso a algunos rumores bastante inverosímiles... ¿¿¿Clint Eastwood???

martes, 21 de agosto de 2012

El Caballero Oscuro. La leyenda renace



Se terminó. "El Caballero Oscuro. La leyenda renace" supone el cierre de la trilogía protagonizada por el Hombre Murciélago que el grandísimo Christopher Nolan inició en 2005 con "Batman Begins" y continuó en 2008 con "El Caballero Oscuro". Y conociéndolo, cuando él dice "se acabó", hay que creérselo, pues el realizador británico es de los pocos capaces de echarle un pulso a la todopoderosa Warner y ganárselo por la mano, consiguiendo que "Origen", por la que la mencionada compañía no daba un duro, se convirtiera en la cinta más taquillera de 2010 (el pulso consistió, parece ser, en que o le producían el film protagonizado por Leonardo DiCaprio o no hacía la tercera de Batman...).

"El Caballero Oscuro. La leyenda renace" tiene lugar ocho años después de los hechos relatados en "El Caballero Oscuro", considerándose a Harvey Dent un auténtico héroe que ha hecho posible, directa o indirectamente, el encarcelamiento de cientos de criminales, y a Batman un villano, de ahí que lleve años sin hacer acto de presencia. Pero la aparente tranquilidad reinante en la ciudad de Gotham empieza a tambalearse con la aparición de un nuevo y cruel villano: Bane, quien con sus actos pondrá a la ciudad en jaque, lo que forzará el regreso del Caballero Oscuro, que no sólo deberá enfrentarse a él, sino que también se verá perseguido por la justicia acusado del asesinato de Harvey Dent.

Hablar a estas alturas de la maestría de Nolan detrás de las cámaras y a los guiones me parece una tarea casi absurda, dado que con cada película que rueda o en la que se encarga de construir la historia no hace sino demostrarnos su tremendo talento, obsequiándonos con historias sólidas y originales y con puestas en escena brillantes, sabiendo dar a cada escena su justo toque. Vamos, que el tío es un auténtico genio, de esos que desde hace demasiados años vienen escaseando (lamentablemente) en el mundo del cine.

Pasando al reparto, poca cosa podemos decir, pues sus nombres lo dicen todo por sí solos: a los ya veteranos en la saga Christian Bale, Gary Oldman, Michael Caine y Morgan Freeman se unen Anne Hathaway, Tom Hardy, Marion Cotillard y Joseph Gordon-Levitt. Vamos, un reparto envidiable, perfectamente equilibrado, sobresaliendo, como es habitual en ellos, los ya veteranos Oldman, Caine y Freeman.

En resumen: "El Caballero Oscuro" es cine en estado puro, y del bueno, respetando además la esencia del personaje creado hace ya un puñado de años por Bob Kane. Y nadie, bajo ningún concepto, debería perdérsela. Es más, nadie debería dejar de verla en pantalla grande, que es como realmente llega a apreciarse en todo su esplendor.

¡Ah! Y lo mejor de todo es que con la cinta que nos ocupa, Nolan le ganó otro pulso a la Warner, pues les dijo, todo ancho, que se metieran el 3D por donde les cupiera (o algo parecido, vamos).

lunes, 20 de agosto de 2012

In memoriam: Tony Scott (1944-2012)




Noticias tristes las de hoy: nos ha dejado Tony Scott, productor y director británico de cine, hermano de Ridley Scott y firmante de títulos como "Top Gun", "El último boyscout", "Marea Roja" y "El fuego de la venganza". Parece ser que el realizador condujo su coche hasta un puente, se bajó y se lanzó al vacío, dejando una nota de suicidio. Fueran cuales fueran sus motivos, desde este blog no tenemos nada que decir, limitándonos simplemente a respetar sus deseos, que en este caso le llevaron a acabar con su vida.

Descansa en paz, Tony. Ojalá encuentres en la muerte la paz que no pudiste lograr en vida.

martes, 14 de agosto de 2012

Prometheus



Por fin, después de mucho tiempo escuchando rumores mil sobre si el gran Ridley Scott se pondría de nuevo tras las cámaras para rodar una cinta de ciencia ficción, aquí tenemos "Prometheus", que no sólo supone el regreso del realizador inglés al mencionado género, sino que también se trata de una precuela (para algunos, un reinicio) de su segundo film, "Alien, el octavo pasajero", una de las mejores películas de ciencia ficción (y también de terror del bueno, por más que a algunos les pueda pesar) jamás rodadas.

"Prometheus" discurre a finales del siglo XXI, cuando se descubre en un remoto planeta lo que puede ser el origen de la humanidad, de ahí que se flete una nave tripulada para viajar a ese lugar y así poder llevar a cabo una investigación al respecto. Pero una vez allí, la tripulación de la Prometheus, pues tal es el nombre de la nave, comprobará de la peor de las maneras posibles que no todo es tan bonito como lo pintan y, tal y como reza el póster de la película, lo que parecía el origen de la humanidad puede suponer su fin...

Un film de las características con las que cuenta el que nos traemos entre manos supone un soplo de aire fresco en el panorama cinematográfico actual, en el cual, dejémoslo claro, escasean cintas como las de antaño. No nos engañemos: "Prometheus" tiene unas claras vocaciones comerciales (de ahí el p*** 3D), si bien no es menos cierto que posee un aire que nos hace añorar viejos tiempos, tiempos en los que los realizadores no se cortaban a la hora de mostrar según qué tipo de cosas en pantalla, tiempos en que los productores no estaban todo el santo día encima con el fin que se eliminasen ciertas escenas para conseguir una calificación para todos los públicos (o, ya haciendo un esfuerzo hercúleo, para mayores de 13). Y ello, sin duda alguna, es mérito de Scott, quien está más que cómodo volviendo a uno de los géneros que más prestigio le ha dado (no por nada pertenecen al género de ciencia ficción la ya mencionada "Alien" y la magistral "Blade Runner", en cuya continuación, se dice, Scott está interesado... a ver qué sale de ahí...), aunque no sea el único en el que sabe desenvolverse, pues, a excepción de las nefastas "Legend" y "Tormenta blanca", el hermano mayor de Tony en mayor o menor medida siempre da en el clavo.

¿Qué podemos decir del reparto de "Prometheus"? Pues, a falta de una expresión mejor, que todo él es excelente, desde una ascendente Noomi Rapace que le va a la zaga a la Ripley de Sigourney Weaver hasta un Michael Fassbender soberbio en su papel de androide (recordando inevitablemente al Ash de Ian Holm), pasando por una Charlize Theron que viene demostrando un saber hacer envidiable a la hora de encaminar su carrera y un Idris Elba que desempeña su rol de manera notable.

Para terminar, un par de claves que considero fundamentales a la hora de abordar el visionado de "Prometheus": en primer lugar, y como cae de cajón, se trata de un producto prácticamente sólo apto para fans de la saga "Alien" y muy en particular de la primera entrega rodada por el propio Ridley Scott, y en segundo lugar, no hagan comparaciones con esta última, pues de hacerlas, como es obvio, "Prometheus" saldrá perdiendo, pese a resultar un film de lo más entretenido y de calidad.

jueves, 26 de julio de 2012

Lobos de Arga



Made in Spain, llega a las carteleras "Lobos de Arga", una comedia sobre hombres lobo a la española (o, más bien, a la gallega) que tiene a su favor un factor de considerable importancia en un film de estas caracterísiticas: en ningún momento se toma en serio a sí mismo.

"Lobos de Arga" nos cuenta la historia de Tomás Mariño (Gorka Otxoa), un escritorzuelo que regresa a su pueblo natal en lo más profundo de Ourense para recibir lo que parece ser una especie de homenaje orquestado por su tío, el alcalde (Manuel Manquiña). Al final, no todo resulta ser tan bonito como parecía en un inicio, debiendo Tomás hacer frente a una maldición que tiene como consecuencia que las noches de luna llena los hombres lobo campen a sus anchas. En tal cometido, contará con la "ayuda" de su mejor amigo de la infancia (Carlos Areces), de su editor (Secun de la Rosa) y de un Guardia Civil de lo más guerrillero (Luis Zahera).

Como decía al inicio, el mayor acierto de "Lobos de Arga" es no tomarse en serio a sí misma, de ahí que nos encontremos ante una comedia y no ante una cinta de terror (la cual, inevitablemente, y sin pretenderlo, habría acabado por convertirse en lo primero). El presupuesto con el que se rodó, pese a contar con la participación de un sin número de organismos públicos, cadenas de TV y entes privados, es ínfimo, y eso se nota, pues los efectos especiales son ciertamente pobres, pero al tratarse de una comedia, como que parece que hacen menos daño a la vista. En el reparto, tenemos a un Gorka Otxoa que hace lo que puede, si bien sus carencias interpretativas son más que evidentes, a un Carlos Areces haciendo de Carlos Areces, a un Manquiña haciendo de Manquiña, a un Secun de la Rosa haciendo de Secun de la Rosa y, lo mejor de todo, a un Luis Zahera demostrando que como actor de comedia no tiene precio (su papel de Guardia Civil algo pirado es impagable).

¿Les gustan las comedias de humor fácil, poco inteligente, efectos especiales de andar por casa e interpretaciones normaluchas tirando a malas? En tal caso, "Lobos de Arga" es su película, y habrá momentos en que se reirán a carcajadas (como le ocurrió a un servidor). En caso contrario, no pierdan el tiempo.

jueves, 19 de julio de 2012

The Amazing Spider-Man



2012 es el año elegido por los responsables de Sony para el estreno de "The Amazing Spider-Man", reboot de las aventuras del Hombre Araña. Señalar que "Spider-Man 3", la tercera parte de la trilogía rodada por el gran Sam Raimi data de 2007...

"The Amazing Spider-Man" nos cuenta una vez más la archiconocida historia de Peter Parker (Andrew Garfield), un chaval de instituto al que la picadura de una araña otorga superpoderes, con los cuales se dedicará a combatir el crimen inspirado por el asesinato a manos de un delincuente de su querido Tío Ben (Martin Sheen). En tal tesitura, se verá obligado a enfrentarse al Lagarto, en el que se convierte el Dr. Curt Connors (Rhys Ifans) tras un experimento fallido, al tiempo que trata de conseguir el amor de su compañera de clase Gwen Stacy (Emma Stone).

Valorando el film que nos traemos entre manos, lo primero que me viene a la mente es que se trata de una cinta completamente innecesaria e irrelevante, motivado principalmente por el hecho de que la primera entrega de la trilogía rodada por Raimi es de hace sólo 10 años, por lo que la idea de una tan temprana nueva versión parece un tanto absurda. Se cuenta que la intención inicial de los productores de Sony era la de continuar las aventuras de nuestro querido amigo y vecino Spider-Man con una cuarta entrega rodada una vez más por el realizador de "Posesión infernal", pero las consabidas "diferencias creativas" hicieron que la cosa no cuajara (dicen que Raimi quería como villano al Buitre, para cuya interpretación ya se habría puesto en contacto con John Malkovich, mientras que los productores se decantaban por un malo mucho más comercial y susceptible, por tanto, de ser convertido en una figura de acción que todos los chavales reconociesen inmediatamente). Consecuencia: reboot al canto, nuevas caras, realizar cuasi-desconocido tras las cámaras y éxito prácticamente garantizado a un precio considerablemente más reducido. 

El resultado finalmente obtenido tiene una clara ventaja: la ausencia del inepto Tobey Maguire se revela como un soplo de aire fresco... pero nada más. Y ello porque no nos cuenta nada nuevo, ni siquiera lo hace de una forma innovadora. Marc Webb, a la sazón director de esta nueva versión, podrá tener futuro en el mundo del cine, pero no nos engañemos: no es Sam Raimi, quien para quien esto suscribe es un realizador de los grandes, a pesar de que la taquilla sólo haya corroborado semejante afirmación con las aventuras del Hombre Araña. En lo tocante al reparto, en general correcto tirando a malo, con ciertas salvedades: los grandes Martin Sheen y Sally Field encarnando a los tíos del protagonista, siempre solventes, aunque en esta película parezcan estar un poco perdidos, fuera de lugar; la tercera excepción viene constituida por el intérprete galés Rhys Ifans, si bien en el lado opuesto: ¿acaso no encontraron un actor más desacertado para interpretar al Dr. Connors/El Lagarto? Como ya insinuaba, el guión no aporta absolutamente nada nuevo a la historia, a no ser la presencia de los padres de Peter, que constituye un simple esbozo a desarrollar en eventuales secuelas (que no creo que tarden).

En resumen, "The Amazing Spider-Man" resulta ser un film completamente prescindible para todos aquellos espectadores que disfrutamos, en mayor o menor medida, con las cintas rodadas por Raimi, pudiendo sólo hacer las delicias de las nuevas generaciones que lo aborden desde un punto de vista libre de prejuicios e ideas preconcebidas (si bien esto es algo que bien podrían hacer cogiendo el DVD o Blu-Ray de las anteriores versiones...).

viernes, 8 de junio de 2012

Blancanieves y la leyenda del cazador



Tras el estreno como quien dice antes de ayer de la versión de Blancanieves del realizador hindú Tarsem, la estúpida "Blancanieves. Mirror, mirror", llega a la pantalla grande "Blancanieves y la leyenda del cazador", del debutante Rupert Sanders, que toma el mismo punto de partida que aquélla para discurrir por un camino afortunadamente muy distinto. En el reparto, la crepusculiana Kristen Stweart, la ya veterana Charlize Theron y el ascendente Thor, digo... Chris Hemsworth.

"Blancanieves y la leyenda del cazador" coge a los personajes del clásico cuento de los Hermanos Grimm para elaborar una más que interesante y bastante diferente historia, en la que la princesa Blancanieves (Stewart) debe recuperar el reino que la malvada Ravenna (Theron) le arrebató a su padre, el rey, tras asesinarlo. Para ello, contará con la ayuda del célebre cazador del cuento (Hemsworth), en este caso un personaje considerablemente distinto, y de los famosos siete enanitos (encarnados por un puñado de actores de carácter convenientemente encogidos para la ocasión).

Parece ser que el principal impulsor de la cinta que nos traemos entre manos fue el productor Joe Roth, antaño máximo dirigente de Disney, quien vio el potencial de una nueva versión del cuento (eso sí, antes de tener conocimiento de que paralelamente se preparaba otra versión de la misma historia) tras el exitoso estreno de la muy decepcionante "Alicia en el País de las Maravillas", de Tim Burton, y que él también se encargó de producir. Y para llevar a cabo semejante proyecto le cedió las riendas de la dirección al primerizo Rupert Sanders, realizador proveniente del campo de la publicidad, sector en que ha cosechado un considerable prestigio, revelándose como una más que interesante opción, visto el espectacular resultado final.

En lo tocante al reparto, tenemos a una gran Charlize Theron, que demuestra que, además de aportar una presencia física impactante (antes, su única arma), ahora también hace gala de unas cualidades interpretativas notables que quisieran para sí otras muchas intérpretes, en el desempeño de un papel hecho a su medida (y me río de Julia Roberts...), a un Chris Hemsworth que, más allá del personaje marveliano de Thor, parece que va haciendo progresos, aunque no brille en exceso, y a una Kristen Stewart que tiene mucho que mejorar para llegar al nivel de su compañera de reparto (si bien no dejo de reconocer que el papel de la Reina es considerablemente más interesante y da más de sí que el de la propia protagonista).

En resumen, "Blancanieves y la leyenda del cazador" se erige en un film espectacular, con una historia de lo más sólida, unos efectos visuales impresionantes, una puesta en escena que justifica el prestigio en el sector publicitario de su realizador y unas interpretaciones correctas. Y lo mejor de todo es que, lejos de algunas sospechas que un servidor guardaba cuando acudió al cine a verla, no tiene tintes crepusculianos, existiendo simplemente un conato de historia de amor que no se desarrolla, porque ni falta que hace ni viene a cuento.

Para terminar, no me resisto a resaltar dos instantes de la película, a los que deberían prestar atención, pues merecen la pena y hacen que el espectador esboce una sonrisa, ambos presentes en el cuento de los Grimm, pero sutilmente modificados: el de la mítica manzana envenenada y el del posterior beso que despierta a Blancanieves de su letargo. Bravo.

sábado, 26 de mayo de 2012

Sombras tenebrosas



2012 es el año elegido por el genial director Tim Burton para estrenar su visión personal de "Sombras tenebrosas", un culebrón con tintes fantásticos que data del año 1966 y que hacía las delicias tanto del realizador como de su fiel escudero en lides cinematográficas, Johnny Depp, a la sazón protagonista de esta adaptación cinematográfica, cuando ambos eran unos simples imberbes. Les acompañan la habitual Helena Bonham Carter (esposa y cómplice de Burton desde que se conocieron en el rodaje del remake de "El Planeta de los Simios"), una acabadísima Michelle Pfeiffer, Eva Green, Johnny Lee Miller (casi más conocido por ser el primer ex de Angelina Jolie que por otra cosa), la ascendente Chloë Grace Moretz y Jackie Earle Haley.

"Sombras tenebrosas" nos cuenta la historia de Barnabas Collins (Depp), quien es convertido en vampiro al rechazar los favores de una bruja (Green) y posteriormente enterrado en vida, todo ello para despertarse 200 años después, en plena época hippie, y comprobar que el antaño prestigioso nombre de la familia Collins ya no goza del respeto con el que contaba en épocas pasadas. Es en ese momento cuando decidirá recuperar el orgullo perdido, para lo cual deberá enfrentarse a su vieja amiga la bruja, causante de todas las desgracias acaecidas a su familia a lo largo de esos 200 años.

Una cinta de las características de "Sombras tenebrosas" obliga necesariamente a referirnos a la labor tanto de su realizador como de su interprete principal. Es de sobra conocido por todos que Burton es un realizador de carácter, que siempre (quizá con la unica excepción del ya mencionado remake de "El Planeta de los Simios", que tanto podría estar firmado por él como por el panadero de la esquina) imprime a sus obras unas características señas de identidad, que suelen traducirse en una estética impecable que hace que, con sólo visionar un fotograma, lo identifiquemos al momento como made in Tim Burton y en una historia original en mayor o menor medida, pero siempre de calidad. Pues bien, el film que nos ocupa es 100% Burton en la estética, pero para un servidor hace aguas ya no tanto en la historia en sí (que podría haber dado para mucho, y más en manos del director californiano), sino por el tono, que parece sacado de la telenovela más casposa, el cual, todo sea dicho de paso, era el imperante en la serie que toma como punto de partida, por lo que quizá el problema resida en la idea que quien esto suscribe se había hecho de la cinta (pensando que conservarían historia y personajes, pero que le darían un desarrollo distinto al material del que disponían). Ya delante de las cámaras, tenemos al inconmensurable (como siempre lo califico) Johnny Depp, quien una vez más compone un personaje digno de admiración y se merienda al resto del reparto. Mención especial considero que merece el gamberro Seth Grahame-Smith, que no es otro que el encargado de adaptar el viejo serial a la gran pantalla, porque, si bien su guión no es en absoluto de mi agrado, sí considero que dará mucho que hablar por ser la persona a la que se ha encomendado la difícil tarea de escribir una secuela de "Bitelchús" (que Burton rodará si le gusta el guión) y por ser el escritor tanto de la novela en la que se basa la inminente "Abraham Lincoln: Cazador de vampiros" (producida por... Tim Burton) como de "Orgullo y prejuicio y zombis", de la que, se dice, hay intereses de adaptar a al gran pantalla.

Voy a ser claro: ver "Sombras tenebrosas" si uno no gusta de visionar todos y cada uno de esos culebrones con el que algunas cadenas de TV nos torturan en cada sobremesa supondrá una pérdida de tiempo, y de las gordas. De otra manera, pues juzguen ustedes...

Para terminar: tras la irregular "Sweeny Todd, el barbero diabólico de la calle Fleet", la tremendamente aburrida "Alicia en el País de las Maravillas" y la horrenda "Sombras tenebrosas", me gustaría preguntar: Tim, ¿qué te está pasando? Para salvarte, ponemos nuestras esperanzas en la próxima "Frankenweenie".

viernes, 18 de mayo de 2012

Los Juegos del Hambre



Cuatro años ha tardado Hollywood en adaptar al cine "Los Juegos del Hambre", novela publicada en 2008 y escrita por Suzanne Collins, que ha dado lugar a la cinta de título homónimo dirigida por Gary Ross. El resultado es un producto hecho al amparo de la saga "Crepúsculo" que llega en el momento idóneo para barrer la taquilla adolescente, puesto que el libro (y sus dos continuaciones, coming soon en la gran pantalla) ya gozaba de una notable popularidad, sobre todo en una determinada franja de edad que no va más allá de los 20 años. Eso sí, y aclarémoslo ya: "Los Juegos del Hambre", la película (pues no he tenido el gusto de leer la novela) juega en una liga distinta a "Crepúsculo".

"Los Juegos del Hambre" narra la historia de un hipotético mundo futuro en el que (se supone) los antiguos EE.UU. están divididos en distritos, de cada uno de los cuales una vez al año se escogen un chico y una chica que participarán en los juegos que dan nombre al libro/film con un único objetivo: matarse entre ellos, de manera que sólo quede uno en pie (¿es cosa mía o esto desprende un cierto "tufillo" a "Battle Royale"?). En una situación tal es en la que se ve metida Katniss Everdeen (la ascendente Jennifer Lawrence), quien se presenta voluntaria para participar en los juegos con el fin de evitar que su hermana pequeña sea la elegida, viéndose obligada a  luchar por su vida para volver (en mayor o menor medida) sana y salva a su hogar.

Hablar del film que nos ocupa implica hacerlo de su protagonista, la joven Jennifer Lawrence, quien a sus 21 años va camino de convertirse en una mega-estrella de Hollywood (si es que no lo es ya), sobre todo gracias al éxito que está cosechando la cinta de Gary Ross allá donde se estrena, si bien hay que salientar que la chica no anda falta de cualidades interpretativas, demostrando que es mucho más que una cara bonita y que dará mucho más que hablar en los años venideros (y no sólo con las adaptaciones de los dos libros restantes de la trilogía de Collins). Hablando de Ross, hemos de reconocer la gran labor desempeñada por este realizador tras las cámaras, erigiéndose en la gran baza jugada por los productores a la hora de tomar la sabia decisión de colocar a alguien con experiencia y buen hacer en la silla de director (habiendo elegido para la adaptación de la segunda entrega, "En llamas", al más que interesante Francis Lawrence), y no a un inútil cualquiera que se limitase a rodar y marcharse (como fue el caso de la primera entrega de "Crepúsculo", a cargo de la inepta Catherine Hardwicke).

En resumen, que "Los Juegos del Hambre" merece la pena, y su mejor baza es... que no es "Crepúsculo", aunque de buenas a primeras lo pueda parecer, algo que para quien esto suscribe supuso un soplo de aire fresco.

Por cierto, ¿por qué todo el mundo se empeña en hablar de "Los Juegos del Hambre" como el trampolín de Jennifer Lawrence cuando ya desempeñaba un rol de considerable importancia (el de Mística) en la magistral "X-Men. Primera generación"?

viernes, 4 de mayo de 2012

Los Vengadores



Por fin, después de años y años de ideas, proyectos y rumores mil, ha llegado a las pantallas grandes de todo el mundo "Los Vengadores", adaptación del archifamoso cómic de Marvel que aglutina a un buen puñado de los más míticos personajes de la conocida como "Casa de las Ideas", y lo hace de la mano del realizador/guionista Joss Whedon y de la división cinematográfica de la propia editorial, la cual, poco a poco y desde "Iron Man", la primera cinta 100% Marvel, por así decir, ha ido tejiendo una tela de araña que ha venido a desembocar en el film que  nos ocupa.

"Los Vengadores" reúne a Iron Man (Robert Downey, Jr.), el Capitán América (Chris Evans), Thor (Chris Hemsworth), la Viúda Negra (Scarlett Johansson), Hulk (Mark Ruffalo) y Ojo de Halcón (Jeremy Renner), los cuales, bajo la batuta del director de S.H.I.E.L.D., Nick Furia (Samuel L. Jackson), habrán de hacer frente a una conspiración de dimensiones épicas tramada por el malvado hermanastro de Thor, Loki (Tom Hiddleston) en connivencia con un misterioso aliado. El resto: una simbiosis perfecta entre cine y cómic que trae como consecuencia una de las cintas del año.

Hablar de "Los Vengadores", la película, es necesariamente hacerlo de su director y guionista, el gran (sí, sí, el GRAN) Joss Whedon, creador de series como "Buffy cazavampiros" y "Dollhouse", quien con la película que nos traemos entre manos ha entrado de cabeza, y por méritos propios, en el Olimpo de los realizadores actuales que son merecedores de semejante calificativo, algo que, todo hay que reconocerlo, ya se venía labrando desde hace unos cuantos años, y sobre todo, en opinión de un servidor, desde la magistral "Serenity", que no hacía sino llevar a la pantalla grande "Firefly", una serie de su propia cosecha que lamentablemente fue cancelada tras sólo 14 episodios.

En lo tocante al reparto, considero que poco se puede decir a estas alturas, puesto que, con la excepción de Jeremy Renner y de Mark Ruffalo (quien sustituye al problemático Edward Norton en la piel del Dr. Bruce Banner/Hulk), sus integrantes son ya más que conocidos, ya que cuentan en su haber con sus propia cintas (en el caso de Robert Downey, Jr., con dos, y en camino la tercera). Así, todos ellos son, en mayor o menor medida, "perros viejos" en su oficio, afrontando, en unos casos con mayor fortuna que otros, unos personajes que conocen y dominan. Eso sí, no me quedaría a gusto si no destacara la labor del inconmensurable Downey, Jr., quien, tras su resurgimiento después de salir del agujero en el que estaba metido por culpa de su adicción a determinadas sustancias, parece haber nacido para interpretar a Tony Stark/Iron Man.

Resumiento, "Los Vengadores" se erige en un film casi perfecto, teniendo en cuenta, como es obvio, el género en el que nos movemos. Y ello porque, como mencionaba al inicio, supone una combinación perfecta entre cine y cómic, obsequiándonos con una historia sólida, una puesta en escena soberbia (gracias, Joss), unos efectos especiales impecables y unas interpretaciones, si bien no de Oscar, sí más que correctas.

Ahora más que nunca, "Joss Whedon is my master now". ¡Peliculón!



viernes, 20 de abril de 2012

Battleship



Tras el éxito, mayor o menor en función de cuál de las entregas de la trilogía estemos hablando, de la saga "Transformers", de la mano del realizador Michael Bay, se estrena ahora en las pantallas grandes de todo el mundo "Battleship", también proveniente de la factoría juguetera Hasbro (ahora con "división cinematográfica", claro) y que se basa, como ya el que más y el que menos sabe, en el célebre juego de mesa conocido a este lado del Gran Charco como "Hundir la flota". ¿Inverosímil? Pues un rato...

"Battleship" tiene como protagonista a Alex Hopper (Taylor Kitsch), quien, al contrario que su hermano Stone (Alexander Skarsgard), miembro de la Marina responsable y un poco estirado, se revela como un auténtico desastre, si bien habrá de enfrentarse a una situación que, por circunstancias de la vida,  lo llevan a hacerse cargo del mando de un destructor que ha de enfrentarse... a una invasión extraterrestre. Es entonces cuando se plantea una suerte de enfrentamiento entre el barco de la Marina y la nave alien, en lo que pretende recordarnos lo que es una partida del ya mencionado "Hundir la flota". Tal línea argumental, traidísima por los pelos por motivos obvios, es el punto de partida de la cinta que nos ocupa, que se erige en uno de esos productos, muy en la línea de "Transformers", en los que la historia poco o nada importa, desarrollándose como una especie de expositor de efectos especiales a mansalva y malas interpretaciones por doquier.

Detrás de las cámaras, tenemos al más que solvente Peter Berg, quien empezó su andadura cinematográfica como actor pero que pronto recondujo su carrera hacia la dirección, haciéndose cargo de títulos como "Very bad things", "Tesoro del Amazonas" o "Hancock", y que en "Battleship" desempeña una labor notable pues es perfectamente consciente del producto que tiene entre las manos, obsequiándonos con un film que entretiene en todo momento a pesar de lo limitadísimo de su guión (o más bien, esbozo argumental). Ya en lo tocante al reparto, destacar a dos de sus integrantes: un Liam Neeson en un nuevo trabajo alimenticio, de los que gusta tanto hacer útimamente, y una Rihanna que debuta en el mundo del cine y de cuya "interpretación" poco podemos decir (ya que si es mala como cantante, imagínensela como actriz...). El resto.... ¿a quién le importa?

Desde luego, no deja de ser llamativo que algunos productores hollywoodienses se fijen en las cosas más inverosímiles para sacar una inspiración que acabará traduciéndose en una película. Así, la línea de juguetes "Transformers" dio lugar a la saga del mismo título, mientras que la atracción de Disney World "Pirates of the Caribbean" supuso el germen de una de las sagas más taquilleras de la historia del cine como es la de "Piratas del Caribe". Y ahora parece que le toca el turno a los juegos de mesa, o al menos esa era la intención hace unos años, si bien con el transcurso del tiempo todo parece indicar que semejante prodigiosa idea se va a quedar en agua de borrajas, siendo "Battleship" la única, o una de pocas, de unas cuantas traslaciones del tablero a la gran pantalla que hace no demasiado estaban previstas. Creo que a nadie se le puede escapar la razón de que tamaña brillantez no prosperase...

Resumiendo, y ya para terminar: "Battleship" hará las delicias de todos aquellos espectadores que disfrutaron de la saga "Transformers" (o, por lo menos, de la primera) y que gustan de todos esos productos que ofrecen explosiones, acción, efectos visuales y nada de guión. Y si no pertenecen a ese grupo, mejor harán en ahorrarse el dinero.

viernes, 13 de abril de 2012

Ira de Titanes



Tras el estreno en 2010 del remake de "Furia de Titanes", llega ahora a la pantalla grande "Ira de Titanes", la secuela de la nueva versión (¡toma originalidad!). Y lo hace con un claro objetivo en mente, o al menos así nos vendieron que era la intención de sus principales responsables: hacernos olvidar a su predecesora, pues prácticamente nadie quedó contento con ella (y más, tras su chapucera conversión al omnipresente 3D en la India). Claro que eso también era lo que pretendían hacer las mentes pensantes (aunque mucho, mucho me da que no pensaban...) detrás de "Ghost Rider. Espíritu de venganza. En fin, comencemos, que la cosa tiene tela para dar y repartir.

"Ira de Titanes" sigue a un Perseo (nuevamente Sam Worthington) que, 10 años después de las aventuras narradas en la anterior entrega, compagina sus tareas como pescador y "padre soltero", tras la muerte de Io (que se nos cuenta de pasada, como para justificar la ausencia en el film de Gemma Arterton). Claro que en esas, y a causa de un plan tramado por el pérfido Hades (Ralph Fiennes, otra vez) y su sobrino Ares (Edgar Ramírez, que le pone nueva cara al Dios de la Guerra, pero que tanto da, pues ya ni nos acordamos de quién lo hacía en la primera película) para liberar a los temibles Titanes, se verá obligado a acudir en ayuda de su padre Zeus (repitiendo Liam Neeson). Argumento innovador, ¿a que sí?

Pasemos a las valoraciones: siendo claro, nos encontramos ante un caso como el de "Ghost Rider", esto es, que tratando de mejorar lo anterior, la han cagado a base de bien... Y es que vale que "Furia de Titanes" no era gran cosa, pero al menos era entretenida, con unos efectos especiales ciertamente notables y un ritmo narrativo que no aburría, dentro de sus grandes carencias, pero es que su secuela es un producto de lo más soporífero, contándonos una historia sumamente parecida a mil cosas que ya hemos visto una y otra vez, claro que eso ya nos lo esperábamos, pero lo hace de la peor forma, "obsequiándonos" con una cinta de esas que parece que no se terminan porque no pasa nada, y cuando sí pasa, pues ya ni nos importa...

Una de las medidas tomadas para tratar de enmendar los errores del fim precedente fue no contar con el realizador galo Louis Leterrier, también firmante de "El increíble Hulk", cuya silla ocupa en este caso Johnathan Liebesman, que últimamente semeja ser una suerte de "realizador de encargo" de esos que gustan tanto a algunos productores, que llegan, ruedan, cobran y se van, sin aportar un ápice de personalidad al resultado finalmente obtenido. En lo tocante al reparto, tenemos al "cacho de carne" Worthington, el cual, como nos tiene acostumbrados, demuestra que no tiene ni idea de actuar, pero como llena la pantalla, pues parece que ya da igual. Luego, tenemos por segunda vez a Liam Neeson y a Ralph Fiennes en uno de esos trabajos que se suele dar en llamar "alimenticios", de cobrar el cheque y poco más (los cuales, seamos sinceros, parecen gustar mucho a Neeson en los últimos tiempos). Del resto del reparto, poco que contar, salvo el curioso hecho de que gran parte de él cambia con respecto a la primera película, pero como son secundarios que poco aportan a la trama, lo mismo da. Eso sí, tenemos a un Bill Nighy ciertamente pasado de rosca...

Resumiendo: "Ira de Titanes" supone una auténtica decepción, ya no en lo tocante a la historia contada, sino al conjunto en sí, pues cuando uno se rasca el bolsillo para pagar la entrada, lo mínimo que se espera de un producto de estas características es que resulte entretenido y no que le haga a uno cabecear...

Como dije al respecto de "Inmortals": "Ira de Titanes" convierte en buena a "Furia de Titanes".

viernes, 16 de marzo de 2012

Luces rojas



Tras el taquillazo que supuso en 2010 "Buried (Enterrado)", protagonizada única y exclusivamente por un sobresaliente Ryan Reynolds y rodada de una forma bastante modesta (como no podía ser de otra manera, dado su planteamiento argumental), su director, el gallego Rodrigo Cortés, nos trae ahora "Luces rojas", su esperadísimo nuevo proyecto, que a priori viene avalado por la presencia de Robert DeNiro. Aunque, bueno, más que traérnoslo, casi, casi nos lo tira a la cara...

"Luces rojas" nos cuenta la historia de dos investigadores (encarnados por Cillian Murphy y Sigourney Weaver) que se encargan de "desmontar" y desmitificar los supuestos poderes sobrenaturales de un puñado de farsantes que se jactan de ser "videntes" y de poder llevar a cabo toda una serie de actos que van en contra de toda lógica y ley natural. En ello, es cuando hace acto de presencia un tal Simon Silver (horrendo DeNiro), el mejor y más grande vidente de todos los tiempos, quien lleva años desaparecido del mapa y prepara un regreso a lo grande.

¿Cómo podría expresar ilustrativamente lo que supone ver "Luces rojas"? Ah, sí... Ni más ni menos que un auténtico insulto. Y es que la cinta no nos cuenta nada, los minutos pasan y el más absoluto aburrimiento invade al espectador, quien, transcurrida una hora de tedio puro y duro, ya sabe que el film no le va a ofrecer ni siquiera un mínimo "algo" que le haga pensar que aunque sólo sea una pequeña fracción del (cada vez más elevado) precio de la entrada no ha sido tirado directamente al cubo de la basura. Así como el anterior proyecto de Cortés (la mencionada "Buried") estaba ejecutado con notable maestría a pesar de ser la segunda incursión del realizador de Pazos Hermos (Ourense), lo que nos hacía pensar en que podría disfrutar de un más que prometedor futuro, la película que nos ocupa tira las expectativas generadas en torno a su persona directamente al fondo del retrete. Ya en lo tocante a su reparto, supuestamente viene avalado por la presencia del otrora grande Robert DeNiro, quien, como, si no me equivoco, ya he mencionado en alguna que otra ocasión, está acabado, por mucho que le pese a él o a quien quiera, llevando a cabo en el plazo de los últimos años un rol tras otro que no hacen sino ensuciar sus más memorables interpretaciones del pasado. Del resto, tenemos a una notable Sigourney Weaver con un papel que requería muchísimo más del escaso jugo que se le saca en la cinta y un Cillian Murphy simplemente correcto. En este punto, sin duda alguna el gran descubrimiento del film es el de Elizabeth Olsen, que dará mucho que hablar (y me río a carcajadas de sus supuestamente famosas hermanas mayores gemelas...).

Por si no lo han notado, el cabreo que me entró viendo "Luces rojas" hace ya casi una semana aún me dura, por lo que recomiendo encarecidamente que bajo ningún concepto la vean si no quieren sentirse insultados, como le pasó a un servidor.

Termino: Rodrigo, espero que esto sea un tropezón en tu carrera y que tu siguiente proyecto continúe por la buena senda trazada por "Buried" (en cuyo caso trataré de borrar "Luces rojas" de mi memoria y hacer como si no hubiera existido). Y Robert, retírate ya...

sábado, 3 de marzo de 2012

Indomable



Steven Soderbergh tiene una cualidad de lo más destacable, que no es otra que la de ser capaz de poner un proyecto en marcha y de rodar un film en menos que canta un gallo, y todo con presupuestos relativamente pequeños para lo que son los parámetros habituales de Hollywood (es de sobra conocido que rara vez excede los 20 millones de dólares). Pues bien, del realizador originario de Atlanta nos llega ahora "Indomable", que Soderbergh rodó en su línea, rápido y barato, y que, aunque a simple vista pueda parecer el típico producto de acción, no lo es, pues está pasado por su muy particular filtro.

"Indomable" sigue las peripecias de Mallory Kane (la cuasi-debutante Gina Carano), una suerte de agente secreto que trabaja para una empresa privada que a su vez trabaja para el Gobierno (o para quien le pague...). El caso es que, tras un trabajo que no sale del todo bien en Barcelona y otro a simple vista de lo más rutinario (que Soderbergh nos muestra de la forma más enrevesada y poco clara posible), Kane resulta traicionada por los suyos, viéndose obligada a escapar de los agentes que la persiguen para tratar de aclarar el marrón en el que se haya metida y, de esa forma, limpiar su nombre.

Al comienzo decía que Soderbergh rueda de una forma rápida y con presupuestos ajustados, claro que ello no implica que  todos sus films sean de calidad. De ahí que firmadas por él tengamos notables cintas como pueden ser "Un romance muy peligroso", "Erin Brockovich", "Ocean's 11" (esta mucho más cara de lo habitual, y refiriéndome sólo a la primera entrega de la trilogía, pues la segunda fue una especie de experimento y la tercera una copia de la primera después del churro que resultó ser la segunda) e incluso la aburrida "Traffic", pero también películas nefastas como "Solaris" y "El buen alemán". Pues bien, "Indomable", sin llegar a ser tan mala como las dos últimas, se enmarcaría más bien dentro de esta segunda categoría, pues, para empezar, su planteamiento es del todo rutinario y en absoluto original, lo cual se le perdonaría si fuese una cinta de acción al uso (de esas de consumir y digerir en 5 segundos), pero, tal y como mencionaba al inicio de esta reseña, no lo es, careciendo por completo de todo tipo de ritmo narrativo, hasta el punto de que en ocasiones parece una suerte de collage compuesto por escenas con apenas coherencia unas con otras. Por otro lado, la forma de plantear los encuadres llevada a cabo por Soderbergh no deja de ser llamativa, admitámoslo, pero, como se suele decir, lo poco gusta y lo mucho cansa, de ahí que los numerosos encuadres extraños terminan por saturar al espectador. Y no puedo dejar de mencionar la escasa banda sonora presente en el film, que es muy digna... de los mejores ascensores.

En lo tocante al reparto, quizá en él resida la mejor baza de "Indomable". Éste viene encabezado por la desconocida Gina Carano, una luchadora profesional que despertó la simpatía del director, hasta el punto de que decidió otorgarle el papel protagonista en su nuevo proyecto; como era de esperar, sus aptitudes interpretativas son más bien escasas (a fin de cuentas, no es actriz), si bien esto queda contrarrestado con la contundencia de su presencia escénica, siendo protagonista absoluta e indiscutible (y he aquí el mayor acierto de Soderbergh), lo que nos hace desearle una larga y próspera carrera en el mundo del cine. El resto del reparto está compuesto por actores de notable carácter, cada uno en su línea, pero brillando todos y cada uno: Ewan McGregor, Antonio Banderas, Michael Douglas (particularmente inspirado y demostrando una vez más lo gran actor que es), Michael Fassbender (el actor de moda actualmente en Hollywood), y Bill Paxton, todos ellos arropando y secundando a la "novata" protagonista. Eso sí, en el ámbito interpretativo también tenemos una lacra de considerable entidad, como es la presencia del inútil Channing Tatum...

Resumiendo, "Indomable" engañará a quienes esperen encontrarse con una cinta de acción típica, y hará desconfiar a quienes, como un servidor, conozcan un poco a su realizador, a pesar de lo cual puedan otorgarle una oportunidad porque, de vez en cuando, da en el clavo. Lamentablemente, no es el caso. Y si esta es su visión particular del cine de acción, bien podría habérsela ahorrado.

Ver "Indomable" sólo merece la pena por una cosa: descubrir a Gina Carano. Nada más.

jueves, 1 de marzo de 2012

Ghost Rider. Espíritu de venganza



Tras el estreno en 2007 de "Ghost Rider. El Motorista Fantasma", con la cual prácticamente nadie quedó contento, y saldándose con un relativo fracaso en taquilla (y digo "relativo" porque si ahora estamos hablando de otro film, por algo será, ¿no creen?), poco a poco se empezó a especular con la posibilidad de una nueva cinta, si bien no estaba muy claro si se trataría de una secuela o de un reboot (muy de moda últimamente... en breve, el de Spiderman, cuyas anteriores películas son de antes de ayer, pero bueno...). Es por eso que ahora llega a nosotros "Ghost Rider. Espíritu de venganza", nuevamente protagonizada por Nicolas Cage, que ni patrás consigue salir del hoyo en el que está metido.

"Ghost Rider. Espíritu de venganza" sitúa a Johnny Blaze (Cage) en Europa del Este, tratando de esconderse del mundo en su intento de que el Motorista Fantasma no haga acto de presencia. Pero es entonces cuando un peculiar sacerdote de nombre Moreau (Idris Elba), que, por cierto, se bebe hasta el agua de los floreros, solicita su ayuda para salvar a un chaval de nombre Danny (y, dicen, apellido Ketch, quien en los cómics de Marvel es el segundo Motorista y, algo que se descubre con el tiempo, hermano de Blaze), a quien persigue el mismísimo Diablo, al que ahora llaman Roark, con quien Blaze firmó años atrás el famoso pacto que lo llevó a ser quien es (en este film interpretado por Ciarán Hinds). Y claro, el Motorista aparecerá (de no ser así, no habría película, claro... lo cual casi habría sido mejor, por otra parte).

Dejemos claro desde ya que la cinta que nos ocupa es un auténtico despropósito. Lo más curioso es que los productores, tras el fallido intento de la primera entrega, se plantearon seriamente partir de cero y adoptar una perspectiva diferente en la nueva adaptación del famoso personaje de cómic creado por Gary Friedich y Mike Ploog en 1972, con lo que la cosa parecía tomar forma de reinicio o reboot, para lo cual le dieron la patada a Mark Steven Johnson (también responsable de la fallida adaptación de "Daredevil", de la cual, oh, sorpresa, también se prepara una nueva versión), principal responsable de la primera, y pusieron en su lugar a Mark Neveldine y Brian Taylor (firmantes de las dos entregas de "Crank", así como de "Gamer", ésta notablemenre superior a las primeras). Claro que como protagonista ficharon nuevamente a Nicolas Cage, con lo cual el tema del reinicio quedaba considerablemente en entredicho, viéndose obligados a darle continuidad con la anterior, aunque de forma relativa (y digo esto porque la sensación es bastante extraña, pues a veces parece una secuela al uso, a veces es como que parte de cero... vamos, que lo único que consiguen es generar en el espectador un cacao de los buenos). El tema es que, pretendiendo corregir los errores cometidos, parece que se despistaron y en vez de mejorar con respecto al film de 2007, lo que hicieron fue empeorarlo y tener como resultado una cinta a medio camino entre la comedia, la acción, lo fantástico... y todo ello aderezado con sus escenas a cámara lenta, como manda todo "buen" producto rodado en 3D...

Metiéndonos ya con el reparto, tenemos al frente a un horrendo (como siempre en los últimos tiempos) Cage, que, otra cosa no hará, pero se pasa media película partiéndose la caja a lo pirado..., secundado por un Idris Elba que en ningún momento se toma en serio su personaje, un nefasto Ciarán Hinds (excelente intérprete, pero que aquí gesticula más que si estuviera sufriendo un ataque epiléptico) y un fugaz Christopher Lambert, en un rol más de andar por casa que otra cosa. Y detrás de las cámaras, los realizadores que firman como Neveldine & Taylor, los cuales, seamos sinceros, no tienen ni p... idea de dirigir, pero que se lo pasan bomba en cada cinta que ruedan (y se nota).

En fin, que "Ghost Rider. Espíritu de venganza" convierte a "Ghost Rider. El Motorista Fantasma" casi en una obra maestra de la cinematografía (recalco el "casi"), la cual, por lo menos, y a pesar de ser mala con ganas, resultaba entretenida y ciertamente simpática (pero sin tener tantos detalles cómicos, absurdos e hilarantes como la secuela, para muestra la escena del "lanzallamas", no digo más...).

Y como hago a menudo, termino con un consejo: no vean esta película, no pierdan el tiempo. Me lo agradecerán.

lunes, 27 de febrero de 2012

"Rango": Oscar 2012 a la Mejor Película de Animación



Anoche, los responsables de la Academia De Cine de Hollywood demostraron que tienen buen criterio. Bueno, pensándolo bien, mejor no decir cosas de las que me pueda arrepentir en un futuro más cercano que lejano, porque ni yo mismo me lo creo... Dejémoslo en que la pasada noche hicieron lo que tenían que hacer y obraron con justicia. Y ello, ni más ni menos, porque le otorgaron el Oscar a la Mejor Película de Animación a la magistral "Rango", dirigida por Gore Verbinski (en la foto), escrita por John Logan y doblada por un puñado de estrellas, destacando, por motivos obvios y merecidos, a la persona cuya voz está detrás del camaleón protagonista, el inconmensurable Johnny Depp.

En anteriores entradas en este blog, había ya pregonado a los cuatro vientos los méritos hechos por la cinta de Verbinski para alzarse con la tan ansiada estatuilla dorada, si bien me temía que los académicos de Hollywood razonasen fuera del tiesto, como, por otro lado, suelen hacer a menudo, y decidiesen pagar deudas o granjearse favores que cobrar más adelante otorgándole el premio a otro film distinto. Pero no, pues al final optaron por el sentido común y eligieron la, para quien esto suscribe, única opción posible.

Y ¡ojo! No es mi intención aquí menospreciar o ningunear a los competidores de "Rango" en la misma categoría, y más teniendo en cuenta que entre ellos se encontraba la española "Chico y Rita", de Trueba y Mariscal, pero es que la cinta protagonizada por el pintoresco y peliculero camaleón es cine del bueno en estado puro, presentándonos una historia sólida, bien asentada, con unos más que marcados rasgos de western, y todo ello pasado por el filtro de la animación informática (y de la buena), que la convierte en un espectáculo visual digno de ver y disfrutar.

Ya para terminar, un pequeño apunte: Verbinski ha conseguido con "Rango" realizar uno de los mejores films de su carrera, si no el mejor (tal y como lo leen...), que justamente se ha llevado el Oscar, y ello sin necesidad de rodarlo en 3D, que parece que últimamente no se puede estrenar en la gran pantalla una cinta de animación si no es en ese puñetero formato...

¡Viva "Rango"! ¡Viva Gore Verbinski! Y, ya puestos, y siendo generosos... ¡Viva la Acedemia del Cine de Hollywood! (pero que tampoco se lo crean mucho).

sábado, 25 de febrero de 2012

Viaje al Centro de la Tierra 2. La Isla Misteriosa



En el año 2008, se estrenó en la gran pantalla "Viaje al Centro de la Tierra", una nueva y considerablemente modesta adaptación de la novela del genial Julio Verne del mismo título, que para bastante ha dado en el mundo del cine y de la televisión, habiendo sido puesta en imágenes un buen puñado de veces. En este caso, la adaptación corría a cargo del desconocido Eric Brevig y estaba protagonizada por un Brendan Fraser cuya carrera no era (y sigue sin ser) la de antaño, siendo sus pretensiones más bien escasas, suponiendo una de esas cintas que se hacen de vez en cuando con el simple objetivo de entretener pero que en modo alguno aspira a encaramarse a lo más alto de la taquilla. Sin embargo, y a pesar de que no se pueda decir que batiera récords, sí que funcionó notablemente bien, me atrevería a afirmar que mucho mejor de lo que sus productores se pensaban en un inicio. Y es por ello que ahora llega a nosotros "Viaje al Centro de la Tierra 2. La Isla Misteriosa", una pseudo-secuela que no hace sino adaptar otra de las novelas de Verne como es "La Isla Misteriosa", eso sí, de una forma bastante libre (como ya hacía la primera entrega con "Viaje al Centro de la Tierra", por otra parte).

El film nos cuenta la historia de Sean Anderson (Josh Hutcherson, el único que repite de la primera película, suponiendo casi, casi el único nexo de unión, de ahí que en la introducción me refiriera a la cinta como "pseudo-secuela"), quien, acompañado de su padrastro (Dwayne Johnson, el artista antes conocido como "The Rock"), emprende un viaje en busca de la llamada "Isla Misteriosa" de la novela de Verne. En ello, se enfrentarán a numerosos peligros y vivirán grandes aventuras, al mismo tiempo que Sean se reencuentra con su perdido abuelo paterno (un perdidísimo Michael Caine).

Como relataba en el primer párrafo de esta reseña, la cinta que nos ocupa es sustancialmente más ambiciosa que su predecesora, y eso se nota en varios factores. En primer lugar, su reparto viene encabezado por un actor en alza y de notable éxito como es Dwayne Johnson, y no por una ex-estrella en decadencia como Fraser, a la par de poder jactarse de tener en su plantel al gran Michael Caine (ojo, que sea grande no complica que su actuación sea buena en todas y cada una de las películas que hace). Al mismo tiempo, se nota el aumento de presupuesto, pues los efectos visuales son notablemente superiores (y en tal aspecto, todos sabemos que, en la inmensa mayoría de los casos, la pasta manda...). Detrás de las cámaras tenemos a Brad Peyton, quien en su curriculum ostenta el "honor" de haber sido el responsable detrás de "Como perros y gatos. La venganza de Kitty Galore" y que, sin ser necesariamente un mal realizador, apunta maneras de convertirse en uno de esos directores "de encargo", que se limitan a coger la cámara y rodar de una forma rutinaria aquello que se les encomienda, pero sin aportar absolutamente nada al resultado final. En lo tocante al reparto, nada destacable, salvo quizá el hecho de que Caine, como mencionaba, está más perdido que un pulpo en un garaje, demostrando que, ni más ni menos, está en la cinta única y exclusivamente porque el cheque ofrecido a cambio era más que interesante. Y luego tenemos a Johnson, quien, si bien no puedo dejar de reconocer que es mejor actor que otros "intérpretes" venidos del mundo del wrestling, está más bien limitado en lo que a la actuación se refiere (y él es consciente de ello).

En resumen, "Viaje al Centro de la Tierra 2. La Isla Misteriosa" es entretenida, y punto. No podemos pretender que nos ofrezca nada más. Como tampoco podemos pretender una adaptación fiel de la novela de Verne. Y si usted, fiel espectador, se considera un admirador purista de la literatura verniana, bajo ningún concepto vaya a ver la cinta que nos traemos entre manos.

No quisiera terminar sin expresar algo: MALDITAS ESCENAS A CÁMARA LENTA, ¡MALDITO 3D! Así, en mayúsculas...